Así es el dron policial de Sant Feliu de Guíxols que detecta plantas de marihuana y ahuyenta a jabalís

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La Policía Local de Sant Feliu de Guíxols (Baix Empordà, Girona) ha incorporado un dron de última generación equipado con cámara térmica y altavoz. El aparato se activará durante emergencias, eventos multitudinarios y también ayudará a combatir la delincuencia (porque, por ejemplo, es efectivo para detectar plantaciones de marihuana).

"El objetivo es aumentar la seguridad ciudadana ofreciendo apoyo a la policía", destaca el alcalde, Carles Motas. Para su funcionamiento, dos agentes del cuerpo han recibido formación y se coordinan los horarios para que el dron se pueda activar en cualquier momento.

Detecta los focos de incendios

El aparato ha costado 18.150 euros. Tiene varias cámaras y puede alcanzar una velocidad máxima de 80 km/h en línea recta. Ya se ha utilizado, por ejemplo, en un incendio en la ciudad.

El alcalde del municipio ve a este aparato como "una modernización de la Policía Local". La cámara térmica que lleva incorporada el dron permitirá detectar plantaciones instaladas dentro de chalets o naves, pero también saber dónde se encuentra el foco de un incendio o localizar a personas que se hayan perdido o desorientado en el bosque. La cámara detecta los puntos de calor y los muestra en la pantalla del aparato de control; de esta forma, es fácil identificarlos.

Lee matrículas a distancia y ahuyenta a jabalíes

Además, el dispositivo está equipado con una cámara con zoom que proporciona una imagen nítida desde unos 200 metros de distancia. Esto permite a los agentes identificar a individuos, evitar que animales salvajes puedan hacer destrozos (como el jabalí) o, incluso, leer matrículas. También existe la opción de seguir un vehículo sospechoso. "Lo escogimos porque es ligero y polivalente", relata el jefe de operaciones de la Unidad Aérea de la Policía Local de Sant Feliu de Guíxols, Sergi Montes, quien destaca que "además, es muy seguro".


En esta línea, el dron lleva incorporado un paracaídas, que es obligatorio para realizar vuelos dentro del núcleo urbano del municipio. Éste se activaría en caso de caída, para evitar que el dron causara algún daño o se estropeara. También dispone de una función de aterrizaje de emergencia, por si el motor de una de sus cuatro hélices deja de funcionar, y tiene sensores ópticos e infrarrojos, que hacen que esquive obstáculos de forma autónoma. 

Mensajes desde el aire

Entre sus múltiples funciones, el dron lleva también un altavoz que facilitará a la policía la comunicación con la población. Será útil, por ejemplo, en el caso de rescates o para lanzar advertencias y órdenes desde el aire. De hecho, después de adquirirlo, la Policía Local ya grabó mensajes. Hay para avisar a personas que han sufrido un accidente que ya se ha activado el operativo de rescate, otros dirigidos a delincuentes para que se detengan o dirigidos a embarcaciones que han invadido la zona de bañistas para indicarlos que deben retirarse..

La autonomía del dron es de 40 minutos por cada par de baterías. "Tenemos baterías por dos horas y media", explica el jefe de operaciones de la Unidad Aérea, que detalla que, sin embargo, "se cargan en 20 minutos y se puede hacer desde el coche patrulla". Además, el aparato puede despegar aunque las condiciones meteorológicas sean adversas (por viento, lluvia o incluso si hay pequeñas tormentas de arena).

Sergi Montes considera que el aparato permitirá a la policía "ganar agilidad" porque "desde el momento en que salta el aviso a activarlo, pueden pasar pocos minutos". Tanto él como el agente Marc Gelabertó han recibido formación para pilotarlo y garantizar que siempre habrá alguien capaz de ponerlo en funcionamiento. El jefe de la Policía Local de Sant Feliu de Guíxols, Marc Peña, afirma que el dron supone "dar un paso adelante a nivel tecnológico para mejorar la seguridad" y que el objetivo futuro es "formar a más agentes para que se incorporen a esta unidad".